Quique González en Valencia ¡NUEVA FECHA!
- Lugar: Espai Rambleta (Ram Club)
- Fecha: 10 de julio de 2019
- Horario: apertura 21:00h / QUIQUE GONZÁLEZ 22:00h
- Precio: Entrada General 30€ + gastos de gestión / Taquilla 35€
- Menores de 16 años deben ir acompañados de tutor legal con autorización de responsabilidad sobre el menor. (Descarga aquí la hoja de autorización de menores)
Quique González vuelve al lugar al que pertenece
– El músico madrileño tiene previsto ofrecer una serie de conciertos de verano que servirán de prólogo a la presentación de un nuevo trabajo discográfico antes de final de año.
La noche del 2 de octubre de 2017 Quique González cerró en el Teatro Rialto de Madrid su última gira hasta la fecha, la que inició tras la publicación de su disco ‘Me mata si me necesitas’ junto a la banda bautizada como Los Detectives. A mitad de concierto, por el patio de butacas los teléfonos móviles del público empezaron a escupir una noticia que tristemente quedaría confirmada poco después: el fallecimiento de Tom Petty a causa de un ataque al corazón. El gran edificio del rock americano se quedaba sin uno de sus moradores más distinguidos mientras el músico madrileño, ferviente admirador del rockero nacido en Florida, ejercía su oficio sobre las tablas ajeno a lo que acababa de ocurrir a miles de kilómetros en un hospital de Los Ángeles. El buzón lleno de mensajes con la noticia al bajar al camerino le impidió disfrutar de la euforia de haber cerrado una gira tan determinante. «Estoy tristísimo por la pérdida de mi héroe. Gracias por tu amor a la música y por tu ejemplo como artista, Tom”, escribiría días más tarde en sus redes sociales el tipo que hace años invirtió parte del dinero del adelanto de uno de sus discos (‘Salitre48’) en volar junto a un amigo de la infancia al estado de Nueva York únicamente para asistir a un concierto de Petty. El mismo que siempre asegura que su disco favorito de la vida es ‘Wildflowers’.
Desde aquella noche Quique González se ha mantenido alejado de los focos. Recientemente, con motivo de un homenaje colectivo al periodista Santiago Alcanda, reapareció sobre las tablas de la Sala Galileo en Madrid con su guitarra acústica para interpretar ‘Nadie podrá con nosotros’, un tema de su disco ‘Daiquiri Blues’, el primero que grabó en Nashville con el productor Brad Jones. “Nadie podrá con nosotros, pero estuvieron muy cerca ayer”, dice el estribillo de esa canción. Primero la seguridad, la declaración de intenciones, y a continuación la advertencia, el reparo. Horas antes de esa actuación en Galileo, Quique confesaba en la intimidad su necesidad de presentarse ante el público después de año y medio sin hacerlo. “Parar durante un tiempo es necesario, pero también te genera dudas sobre si la gente seguirá ahí cuando regreses, y si tú mismo estarás a la altura”, decía medio en broma medio en serio. De nuevo la afirmación primero y la incertidumbre justo después.
Quizás sea esa la dualidad a la que se ven abocados quienes, como él, entienden la música más que como un medio de vida, como una forma de vivirla. Quique González es hoy un artista sólido que se encuentra en transición hacia una nueva etapa. Con la garantía que suponen las más de dos décadas de trayectoria a sus espaldas y un legado impecable pero también con la inquietud de quien sobre esos cimientos comienza a levantar una nueva construcción.
Por eso ha decidido que ya es hora de salir otra vez a la carretera. No para defender un nuevo disco (eso llegará dentro de unos meses y atención, porque sorprenderá) sino para probarle un traje nuevo a sus canciones ya conocidas. Así, el artista madrileño afincado en Cantabria tiene previsto ofrecer una serie de conciertos de verano que servirán de prólogo a la presentación de un nuevo trabajo discográfico antes de final de año. En esta gira veraniega estará acompañado por una banda formada por parte de Los Detectives junto a nuevas incorporaciones, entre ellas la de su amigo Alex Muñoz, el joven guitarrista español que lleva años triunfando en Nashville, la ciudad en la que en cada casa hay como mínimo una guitarra.
Será un periplo que lo llevará por salas de distintas ciudades y cuyo repertorio, según adelanta el propio músico, sonará más americano que nunca, ya que el puntal de esta gira, “la nave nodriza” como él dice, será el fantástico Huercasa Country Festival, del que ya disfrutó entre el público el año pasado y del que se confiesa fan al entender que la motivación principal del evento de Riaza es el puro amor a la música. Fuimos testigos de cómo en el backstage de ese festival el pasado verano, tras saludar a The Band of Heathens, junto a los que tocó Alex Muñoz, y al mítico Steve Earle, cabeza de cartel de la noche del sábado, fue donde se empezó a gestar su participación en la edición de este año.
Desde su casa cántabra en los valles pasiegos, donde pasa la mayor parte del tiempo cuando no está de gira, Quique González afronta con la responsabilidad y el entusiasmo habituales el futuro inmediato. Está impaciente por ponerse en movimiento, algo que siempre ha necesitado. Y no es que haya estado parado precisamente, porque durante estos largos meses sin subirse a un escenario ha trabajado duro en su nuevo proyecto discográfico. Dentro de pocos meses dará a conocer el fruto de ese esfuerzo.
Un trabajo que supone un paso adelante en cuanto a búsqueda de nuevas expresiones artísticas, ya que se aleja de parámetros habituales manejados por el madrileño hasta ahora. Su carrera (más de 20 años ya en el oficio desde que en la primavera de 1998 se publicara ‘Personal’, su primer disco) ha mantenido una trayectoria en constante progresión pero no exenta de dificultades, viéndose obligado en ocasiones a defender su independencia y sus principios con el cuchillo entre los dientes. Eso le ha llevado a vivir situaciones complicadas que solo su tesón, su amor a la música, una colección de canciones maravillosas y una creciente legión de seguidores extremadamente fieles (su ejército del rock) han conseguido salvar.
En ‘Wildflowers’, Tom Petty escribió que uno pertenece al lugar en el que se siente libre. Sin duda, ese lugar para Quique González está en el escenario, ante el público y al frente de una banda. Y a él regresa, tras esta temporada refugiado en su querido valle cántabro, al que también pertenece y donde hace años instauró su hogar. Ese en el que crecen canciones entre las flores silvestres.
Chema Doménech, periodista. Autor del libro ‘Salitre48. Quique González en el disparadero’ y de Esacancionmesuena.com